La impunidad y los execrables frutos pendientes

23/04/2011
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
-A +A

Cuando parecen estar contados los días de la Ley de Caducidad queremos recordar uno de esos debates que marcan trayectorias. Hace cinco años Hugo Cores y Eleuterio Fernández Huidobro cruzaron opiniones sobre la extradición de tres militares uruguayos a Chile. Nos referimos a los ya sentenciados: Tomás Casella, Eduardo Radaelli y Wellington Sarli. Estos militares estaban involucrados en el secuestro y asesinato del genocida chileno Eugenio Berríos, ocultado en nuestro país para evitar que declarara por el asesinato de Orlando Letelier. En 1993, bajo la presidencia de Luis Alberto Lacalle los militares habían dado un verdadero golpe de estado técnico. Al respecto se han escrito varios libros de investigación y hasta se ha filmado una película ganadora de varios premios internacionales (1).

En aquella polémica Hugo Cores argumentaba largamente a favor de la extradición. Eleuterio Fernández Huidobro, en contra. En el fondo estaba la continuidad en democracia de la coordinación represiva en América y los desafíos de la cuestión militar en Uruguay.

Hace exactamente cinco años, el 17 de abril de 2006, Hugo Cores concluía el debate con el artículo que transcribimos. Los acontecimientos recientes a partir de la aprobación del Senado de la Ley Interpretativa actualizan aquellas preocupaciones. También nos resaltan la importancia estratégica del programa y de la unidad de acción de nuestro gran instrumento, el Frente Amplio.

Detrás del problema jurídico, profundamente ético y de alta significación política de la defensa de los Derechos Humanos también está la cuestión militar, un tema que involucra a todos uruguayos y en particular, a las fuerzas populares y democráticas.

Para quienes quieran revisar en profundidad aquél debate dejamos más abajo los enlaces ordenados de las expresiones de ambos participantes (2). Ahí aparecen reflejadas dos líneas de razonamiento, dos actitudes frente a la impunidad.

Desde nuestro punto de vista la ley de caducidad significa una rémora parasitaria, una sobrevivencia horrorosa de la dictadura, una bestialidad antijurídica rabiosamente cosida para garantizar la impunidad de los responsables de la mayor carnicería del siglo XX uruguayo. En nosotros recae la responsabilidad de que los intentos de las políticas de amnesia colectiva continúen reforzando la capacidad de indignación de la población frente a criminales que a todas luces siguen ensañados, en particular, con las mujeres violadas y los niños robados. Llegó la hora de conjugar, unidos, JUSTICIA y DERECHOS HUMANOS. ¿Es saludable que desde una institución de la república se sustente una épica basada en la complicidad del silencio y la impunidad?

Fuerzas Armadas, lo pendiente sigue colgado

POR HUGO CORES

1. No resulta fácil discutir con el compañero EFH. Dado su lenguaje sobrado y su propensión a los adjetivos hirientes, hacerlo es casi una osadía. Difícilmente sale ileso quien decida no acatar sus ‘argumentos’. Después de muchos años blandiendo la pluma, vino a resultar que hirió a menos gente como guerrillero que como polemista.

2 A la vez, con el tono y el lenguaje con que se expresa resulta sorprendente. Cuando habla en defensa de los militares pedidos por la justicia chilena los denomina, una y otra vez, ‘capitancitos’, ‘mayorcitos’, ‘perejiles’. ¿Qué léxico es ese? En la vida política del país nunca he oído a nadie que, tratando temas que importan, se exprese públicamente en esos términos. ¿Qué es lo que se quiere trasmitir? ¿Indicios de qué?

3. En el tema que nos ocupa, el ir y venir de aforismos ridiculizadores interesa menos que la materia sobre la que se discute: la situación de las FFAA bajo el gobierno de izquierda y la necesidad de avanzar en la lucha contra la impunidad.

4. Desde esos parámetros analizo la cuestión de las extradiciones a Chile. Carece de interés si el suscrito se apoltronó, se contradice o está amarrado al año 1970.

5. No tengo contacto con ninguna logia militar; están prohibidas. Y son, o pueden ser, una amenaza para la democracia. Todo lo que conozco es lo que se ha venido diciendo en la prensa. O lo que se aprende escuchando a los militares frenteamplistas, que en su momento fueron destituidos y encarcelados. Es bastante para formarse una opinión.

6. EFH sostiene que apoya su posición en el análisis del expediente judicial sustanciado en el Juzgado de Pando. Debo decir que, del mismo modo que para el periodista de Brecha, para el suscrito ese material resultó infranqueable. No está disponible para el público.

7. EFH me reprocha que sólo apoyo el juicio a militares, en este caso de bajo rango. No es así. Creo que habría que juzgar a todos los que han cometido crímenes contra la humanidad, incluyendo a los civiles como Bordaberry y Juan Carlos Blanco. En el caso que nos ocupa al general Aguerrondo, jefe de los que ahora están requeridos por la Justicia chilena. Y a los responsables civiles que hicieron la vista gorda, como Mariano Brito y Luis A. Lacalle.

8. Sostiene que me equivoco porque el secuestro y asesinato de Berríos no es una expresión tardía del Plan Cóndor. Para él es un aperitivo, dice. Un anticipo de males mayores que están por venir. Siendo que EFH vislumbra eso, con más razón debiera acompañar medidas destinadas a procesar a todos los que han ejecutado acciones de este tipo.

9. Sostiene también que me equivoco pues no hubo secuestro. Bien y si no hubo secuestro ¿cómo llegó Berríos a la playa en la que fue encontrado con dos tiros en la nuca? Estaba bajo custodia de militares uruguayos y apareció muerto. Lo que ocurrió en el medio es secuestro.

10. Para EFH el pedido de extradición forma parte de un atropello a nuestra soberanía nacional. Una violación iniciada cuando se trajo a Berríos a Uruguay en 1991 para evitar que compareciera ante la justicia.

11. Los hechos muestran que el pedido formulado por la Justicia chilena es bien distinto a la acción pinochetista de quienes, en 1992, revistando en la ‘Unidad Especial’ de la DINE, secuestraron a Berríos. La acción de la Justicia es el fruto de muchos años de lucha democrática, dentro de Chile, contra la impunidad.

12. No es admisible la expresión “los chilenos” que -en pleno sarampión “patriótico”- emplea EFH. De ese modo, mete en un mismo saco a los verdugos pinochetistas de la Unidad Especial de la DINE y a los familiares de Letelier; a Contreras y la DINA y a la Vicaría de la Solidaridad; a los fascistas chilenos con los abogados, periodistas y militantes políticos de ese país que luchan contra la impunidad.

13. Fue la (impresentable) decisión de archivar el expediente judicial en Pando porque no había pruebas contra Casella, Sarli y Radaelli, lo que dejó abierto el camino para que los militares uruguayos sean juzgados en Chile.

14. Berríos fue silenciado para ocultar crímenes de la dictadura pinochetista. El sujeto estaba vinculado a otras actividades antisociales, como la fabricación de gases letales, la elaboración y tráfico de drogas.

15. Esos otros aspectos del personaje Berríos, interesantes para la novela que EFH anunció que quiere escribir, (por el momento podría sacarse las ganas con un unipersonal) no son relevantes para las peripecias del químico de la DINA en Uruguay.

16. La búsqueda que nos interesa es otra. Aquí a Berríos, otros tan asesinos como él pero con más poder y con complicidad de autoridades locales, lo secuestraron y mataron para evitar que declarara en los juzgados chilenos donde se investigaban los asesinatos de Carmelo Soria y Orlando Letelier.

17. No siento ninguna solidaridad ni simpatía por un represor por el hecho que sea uruguayo. Y menos podría sentir rechazo a priori contra un magistrado chileno que esté investigando los crímenes de la dictadura pinochetista.

18. EFH ha dicho que por el secuestro y posterior asesinato de Berríos no hay militares chilenos presos. No sé si eso es así ahora. Lo que sí es público y notorio que hubo varios militares procesados con prisión, entre ellos dos generales (R) de Ejército, Hernán Ramírez Rurange y Eugenio Covarrubias. Ambos dirigían la Dirección de Inteligencia del Ejército (DINE) en la época del secuestro de Berríos, en 1992. Así como el capitán (r) Pablo Rodríguez Márquez, el funcionario civil Raúl Lillo Gutiérrez y el comandante (r) Manuel Pérez Santillán.

19. Todos ellos fueron procesados con prisión. Más que saber si años después siguen presos, importa constatar que el asunto en Chile fue ventilado en los tribunales en forma pública y exhaustiva. Y que la verdad se conoció y se difundió. En Uruguay estamos a muchos kilómetros de esa situación.

20. No se trata que, con posterioridad a la aparición del cadáver de Berríos, “los chilenos” vinieron acá e incurrieron en toda clase de violaciones a las leyes de nuestro país. Compraron testigos, etc.

21. Los que vinieron a investigar la muerte de Berríos ­y me guío por los escritos de un estudioso de estos temas, Samuel Blixen- son Luis Fuentes Sotomayor, Nelson Jofré Cabello y Rafael Castillo Bustamante, investigadores policiales que han trabajado en la aclaración de varios crímenes de la dictadura pinochetista.

22. He sostenido que el programa frenteamplista hacia las Fuerzas Armadas está demorado. Y que uno de los capítulos que importan es la depuración de las FFAA. El senador, y el flemático liberal-tolerante que hay dentro del senador, se horrorizan.

23. Dice EFH que le recuerdo a Hitler y a Stalin. Podía recordarle hechos más recientes, como ser la cantidad de veces que, en la elaboración de resoluciones en el FA, se ha usado esa expresión. Recordar, por ejemplo, la entrevista, en cuya preparación participó EFH, del entonces presidente del Frente Amplio, Dr. Tabaré Vázquez, con el ministro de Defensa Iturria y los comandantes en jefe, en 1997. En ese momento en nombre del FA, se entregó a los mandos militares las resoluciones de los congresos del FA, en las que estaba, con todas las letras, la expresión que hoy tanto mortifica al compañero senador.

24. Democratizar las FFAA, depurarlas de las ideas y de los jefes con ideas golpistas, erradicar la tendencia de los mandos a desarrollar su autonomía frente a la conducción política del país y terminar con los obstáculos a la conducción civil indicada por la Constitución. Sólo eso.

25. ¿Cuál la doctrina que prevalece en las aulas y en los Estados Mayores, la de la Seguridad Nacional? ¿Cómo se enseña en los Liceos Militares la historia uruguaya y latinoamericana de los años que precedieron al golpe de Estado? ¿Qué se trasmite acerca de los años 73 al 84, cuando desde las FFAA arreció la represión contra los sindicatos, los gremios estudiantiles, los docentes, los periodistas, los abogados, los músicos y los carnavaleros?

26. Finalmente, un acto que no podía ser oficial porque así lo había resuelto el gobierno, contó con la presencia de los mandos de las tres armas. No les correspondía asistir a un acto donde se hizo la apología de la dictadura y se atacó al gobierno. Menos correspondía la presencia de efectivos del Batallón Florida y del Regimiento de Blandengues de Artigas de Caballería Nº 1. Qué me dice el compañero EFH ¿hay o no hay un problema que habría que encarar con la conducción de las FFAA?

NOTAS

(1) Buenos ejemplos de libros sobre esta temática son:“El vientre del cóndor: del archivo del terror al Caso Berríos.” de Samuel Blixen, “Silencio de Estado: Berríos y el poder político uruguayo” de Sergio Israel, “Crimen imperfecto: historia del químico DINA Eugenio Berríos y la muerte de Eduardo Frei Montalva” de Jorge Molina Sanhueza y “Operación Cóndor, el vuelo de la muerte” de Francisco Martorell. Por último, resulta interesante la lectura de “Bajo las alas del Cóndor” de José Luis Méndez Méndez, que puede descargarse en línea.

La película es Matar a todos, dirigida por Esteban Schroeder, coproducción uruguayo-chileno-argentina.

(2) Este debate completo puede seguirse a través de los siguientes enlaces:

Berríos. Por Eleuterio Fernandez Huidobro
Por cuestiones del momento. Por HUGO CORES
Cores versus Cores. Por ELEUTERIO FERNANDEZ HUIDOBRO
Fuerzas Armadas, lo pendiente sigue colgado. Por HUGO CORES

Fuente: http://www.pvp.org.uy/?p=1950

https://www.alainet.org/es/active/46080
Suscribirse a America Latina en Movimiento - RSS