Posadas Segura: La JCM estaba metida hasta las orejas en el 68

02/03/2018
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Marcos Leonel Posadas Segura
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Falta construir la organización política capaz de encauzar el potencial social

 

 Marcos Leonel Posadas Segura (Tampico, Tamaulipas, México. 1938), ex secretario general de la Juventud Comunista de México (JCM), reconoció que sus correligionarios tuvieron una participación clave en lo que fue la gestación del movimiento estudiantil de 1968. En pocas palabras expresó: “Estábamos metidos hasta las “orejas”.

 

Afirmó que “la Juventud Comunista -organización auxiliar del Partido Comunista Mexicano (PCM)- cohesionaba al movimiento estudiantil” y fue sin duda, “uno de los pilares”, en materia de organización, de aquel acontecimiento considerado como punto de inflexión en la historia de México y que en este año se conmemora el 50 aniversario.

 

Entrevistado al participar en el “Encuentro Revolución del Pensamiento. Comunistas en el 68 mexicano”, Posadas Segura, entre otros temas, trazó los paralelismos del malestar social de aquellos años y ahora.

 

Coincidió en que Andrés Manuel López Obrador goza de un liderazgo indiscutible desde el punto de vista electoral; pero lo que hace falta es crear una organización revolucionaria, que proponga soluciones y pueda encauzar el hartazgo que permea en nuestra sociedad.

 

 --- ¿Cómo se construyó en los años 60 la Juventud Comunista?

 

---A base de generar una propuesta, una línea política, organizar gente y destacar dirigentes; abrir espacios para el surgimiento de cientos de líderes.

 

En agosto de 1965 inauguramos una etapa de crecimiento, al realizar una asamblea nacional tratando que se reflejara el avance de la organización de la JCM. Por vez primera reunimos como a 70 representantes de grupos locales. En total sumábamos unos 600 en todo el país. Ese día se eligió una dirección. Fui designado como su líder. El equipo se desempeñó muy bien. Por esos años, más adelante, empezó a participar Eduardo Ibarra Aguirre, que venía de Tamaulipas. Realizó varias actividades y luego se incorporó al periódico Oposición.

 

Cuando hicimos el II Congreso, en febrero de 1967, ya éramos 3 mil 500 afiliados. La inauguración del encuentro se llevó cabo libremente en el Teatro de los Insurgentes. La JCM tuvo un crecimiento muy sano. Con gente capacitada. Una estructura eficaz. Fue el resultado de un trabajo interno de gente que no se menciona. Se nombraron a líderes estudiantiles de la JCM como integrantes del Consejo Nacional de Huelga, pero muchos no éramos estudiantes y, gracias en buena parte a ellos, se consolidó la organización.

 

Por aquellos años hubo muchas actividades, por ejemplo, una veintena de circulares internas que eran sendos instructivos de cómo concebíamos el movimiento estudiantil, qué objetivos perseguir, las referencias políticas. Creo que sin eso no hubiera sido posible el resultado (el movimiento de los estudiantes). 

 

Es claro que los comunistas mexicanos estábamos metidos hasta las “orejas” en el movimiento estudiantil del 68. Estuvimos inmersos de modo total. Fue el mayor movimiento de masas en décadas.

 

--- ¿De modo que el activismo de la Juventud Comunista fue antecedente del movimiento de 1968?

 

---Fue uno de los pilares de la organización. El movimiento del 68 tiene otras bases. No lo creó nadie. Una vez que el movimiento estalla, sus partícipes lo promovieron; pero no lo crearon. Surge por otras razones.

 

--- ¿Qué razones?

 

---Pues las razones de orden social como las contradicciones, los conflictos, la represión, el autoritarismo. Hoy, por ejemplo, hay el hartazgo contra el PRI (Partido Revolucionario Institucional) y el PAN (Partido Acción Nacional). Eso no se generó sino por años que se viene acumulando el descontento, la falta de credibilidad, la ira, el miedo. Cómo encauzarlo. Cómo darle forma para que no se pierda. Esa es la problemática paralela de aquel tiempo y la actual.

 

--- ¿Cuál era la actitud del gobierno en esos momentos?

 

---Era la represión, la persecución. La represión ya había tenido un coletazo muy fuerte en 1959 contra el movimiento ferrocarrilero. Y continuó en los años siguientes. Tuvo nuevas expresiones en el 68. Más presos, más desapariciones. ¡No al nivel actual de desaparecidos! No. Entonces eran directa o indirectamente por causas políticas. Hoy tiene otras connotaciones: la violencia se desata entre grupos criminales. Pero también hay violencia oficial.

 

Hoy lo que hace falta es generar una organización política que vea qué soluciones tienen los problemas del país y convenza a la gente sobre lo que hay qué hacer.

 

--- ¿Quiere decir que hoy no hay un partido que pueda canalizar esa energía social?

 

---No. No lo hay. Pero puede surgir.

 

--- ¿Ni un líder?

 

---Bueno, desde el punto de vista electoral sí lo hay. Evidentemente Andrés Manuel López Obrador es capaz de captar este estado de ánimo y presentarse como un candidato ganador. Lo cual es muy importante. Y el movimiento social podría caminar por allí un trecho. Pero después tendrán que venir cosas nuevas.

 

--- ¿López Obrador no podría encabezar ese estado de ánimo?

 

---Solo no puede. López Obrador está encabezando un movimiento. Lo que a veces preocupa mucho es: sí él faltara, qué le pasaría al movimiento. El movimiento no puede desaparecer. Tiene que continuar. Esa es la problemática.

 

Electricista petrolero, melómano, asiduo lector de Romain Rolland, Posadas Segura convocó a mirar hacia el futuro, dejar de lado egos y personalismos, de modo que cada quien aporte lo que pueda en unir voluntades y fuerzas.

 

Concretamente instó a “que cada viejo adopte una brigada de jóvenes” para instruirlos, tener relevo y no pasar a la historia como “una simple nota de pie de página” de un escrito que pocos leen.

 

Hizo un llamado para erigir una “organización política revolucionaria capaz de encauzar la potencia social a cambios verdaderos, hacia un régimen de libertad política, con solución democrática-popular de los grandes problemas que agobian a nuestra sociedad”.

 

Marcos Leonel Posadas Segura fue líder del Partido Comunista Mexicano (PCM), donde también dirigió la revista Oposición (cofundada en 1970 por Arnoldo Martínez Verdugo y después convertida en periódico). Participó en la creación de los partidos Socialista Unificado de México (PSUM), Mexicano Socialista (PMS) y de la Revolución Democrática (PRD). Actualmente es el principal promotor del Movimiento Comunista Mexicano y director del semanario electrónico Tribuna Comunista.

 

 

https://www.alainet.org/es/articulo/191371
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