¡Yo También!

22/01/2018
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Hasta que por fin en la presente campaña electoral algunos candidatos se han atrevido a hablar sobre un tema viejo pero que se ha venido manteniendo oculto debido a un vergonzoso secretismo institucional. Unos lo hacen de manera velada o timorata, casi como obligación de cálculo electorero, otros simplemente callan con sospechosa complicidad y hay quienes con particular vehemencia vienen denunciando estos abusos y afirman saber cómo eliminarlos de cuajo, una vez en gobierno, caiga quien caiga.  No fue sino hasta hace apenas unos años que la tesonera y valiente insistencia del ciudadano Carlos Roberto Loría logró, contra viento y marea, que al fin se hiciera pública la lista de pensionados de lujo. Superada la sorpresa inicial aún hay quienes se resisten a creer que en nuestro país se esté dando este escandaloso saqueo de los dineros públicos.

 

Pero vayamos a las cifras comenzando por decir que apenas un 0,1 % de la población, es decir un poco más de cinco mil personas, reciben como pensiones llamadas de lujo casi un 10% por ciento del presupuesto nacional (cada uno de ellos recibe mensualmente 5, 10 y más millones de colones), lo que equivale a dos cementazos mensuales. ¡Increíble! ¿Verdad? pero lastimosamente cierto.

 

Desde otro enfoque diremos que en la Costa Rica de hoy la diferencia entre una pensión mínima con dineros públicos y una máxima supera las 100 veces, caso único en el mundo y fácil de verificar. Pero además: esas diferencias también se dan entre ex funcionarios que cumplieron las mismas o similares funciones y responsabilidades cuando ejercieron sus cargos en las distintas instituciones. ¿Simple inequidad en un orden social injusto? ¡NO! A esto solo cabe llamársele robos descarados amparado por normas espurias e inconstitucionales y por tanto no punibles, como sí lo son otros actos de corrupción.

 

Son dineros de todos los costarricenses que van a parar a los bolsillos de miembros de lo que ya pareciera ser la nomenclatura de una Casta Superior o de una Sociedad Anónima para Delinquir. Así estamos a pocos días de escoger a las nuevas autoridades de gobierno. Son muchos los indignados que hoy exigen un cambio radical para acabar con estos cleptómanos en el poder político e institucional. Sé que muchos de ustedes quieren que de una vez por todas se acabe con algo tan grave que avergüenza a toda Costa Rica. ¡Yo también!

 

https://www.alainet.org/es/articulo/190509
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