Derechos Humanos en Chile 2017: ¿Tema imprescriptible?

15/11/2017
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Los derechos humanos en Chile 2017: ¿Un tema imprescriptible? La deuda de justicia del estado chileno con las víctimas de la dictadura pinochetista, volvió a invitarse en una campaña electoral. Como un silencio ensordecedor, estará muy presente el 19 de noviembre.

 

Por un lado, están las revelaciones del rol del el ex comandante en jefe del ejército Juan Emilio Cheyre. Ellas evidenciaron los vacíos de la normalización de relaciones entre el ejecutivo y las FF.AA. Un proceso iniciado en el gobierno de Ricardo Lagos.

 

Por otro lado, está la postergación del cierre de Punta Peuco. La cárcel de lujo para militares condenados por violaciones de DDHH. Su existencia interpela la equidad estatal en el trato de los culpable de crímenes de lesa humanidad. Algo que advierte de nuevos intentos de consolidación de la impunidad de esos culpables. Son las promesas tanto del derechista candidato Sebastián Piñera, como del ultraderechista Juan Antonio Kast. Ellos proponen amnistiar quienes gozaron de impunidad durante décadas por razones de ancianidad o salud mental. Desconocen el carácter imprescriptible de los crímenes de lesa humanidad.

 

Todo ello, en contexto de creciente protagonismo del poder judicial. De acusaciones de tortura por ex presos políticos en sus últimos años. Acusaciones que cuestionan, como en el caso de Cheyre, largos años de impunidad.

 

Sin embargo, es un tema inexistente en el programa oficial del derechista Sebastián Piñera de Chile Vamos. También ausente en el del Centro izquierda Alejandro Guillier de la Fuerza de Mayoría. Está reducido a la memoria en el de la candidata de la nueva izquierda Beatriz Sánchez del Frente Amplio.

 

Son desarmonías que persisten como un ruido de fondo, por momentos ensordecedor en el proceso chileno.

 

El Oculto Prontuario de Cheyre

 

Causó revuelo la información entregada por el ejército en octubre pasado al juez Vicente Hormazábal.  Se trataba de la causa intentada por el médico forense Luis Ravanal contra Juan Emilio Cheyre por torturas. El ejército confirmó que quien fuera comandante en jefe del ejército entre 2002 y 2006 había mentido. Cheyre participó activamente en 26 consejos de guerra realizados en 1973. Fue sólo en 2016 que se le acusó. Fue por complicidad en quince asesinatos de la siniestra Caravana de la muerte en la Serena. Fue el nombre del operativo liderado por Arellano Stark que mató 72 chilenos. Stark, condenado a seis años de prisión fue sobreseído por demencia en diciembre de 2015 y falleció en marzo de 2016. en la Serena en 1973. Fue acusado formalmente por el juez Carroza en marzo pasado.

 

Juan Emilio Cheyre comandante en jefe del ejército en 2002

 

Ello no debiera haber sido novedoso porque el ex oficial de ejército Pedro Rodríguez, ya en diciembre de 1999, había acusado a Cheyre de haber dado el tiro de gracia a fusilados de la Caravana de la muerte en la Serena.

 

También, Cheyre había sido acusado en 2000 por el hijo de la pareja de argentinos Lejderman de ser culpable de su asesinato. E 2000 fue finalmente absuelto de responsabilidad. En 2017, Cheyre sigue afirmando que su hoja de vida es intachable.

 

Cheyre participó activamente en 1999-2000, en la Mesa del Diálogo que buscaba transparentar el paradero de los detenidos desaparecidos. Según algunos, Cheyre era el militar favorito del ex presidente Ricardo Lagos. Se le considera como el artífice de la normalización de las relaciones entre el ejecutivo y las FF.AA. Ricardo Lagos lo nombró comandante en jefe del ejercito de 2002 a 2006.

 

¿Errores de la Normalización Ejecutivo/FF.AA?

 

Como se recordará, Cheyre publicó en la Tercera, en noviembre de 2004, una famosa Carta Institucional en la que asumió a nombre de las FF.AA. la responsabilidad por violaciones de DD.HH en la dictadura. Un texto que las justifica por el contexto de guerra fría de la época. Cheyre y el ejército nunca concretizaron la promesa de dar a conocer la verdad sobre los detenidos desaparecidos. La llamada doctrina del ex comandante Ricardo Izurieta, de normalización de las relaciones del ejército con la sociedad, apareció más bien como la justificación del golpe y consolidación del pacto de silencio la omerta en las FF.AA.

 

 

Cheyre fue nombrado por Piñera a la presidencia del Servel en 2012. Después de una emisión de TV en que el hijo de los Lejderman le pidió información sobre el asesinato de sus padres, Cheyre renunció a la presidencia del Servel, pero siguió como consejero hasta 2017. Lagos defendió a Cheyre en esa oportunidad.

 

Lo cierto es que Lagos terminó sufriendo políticamente de las revelaciones de 2016. Ahora, el ex ministro de defensa de Lagos y actual ministro del interior de la presidenta Michelle Bachelet, Mario Fernández, afirma que entonces, no se sabía nada de lo que hoy entrega el ejército. ¿Ingenuidad? ¿Negligencia? onfirm

 

Se trata de un ejemplo evidente de los problemas del restablecimiento de relaciones apropiadas entre el poder ejecutivo y las FF.AA. que grava aún el proceso político chileno. Autonomía que se manifiesta en el pacogate y el milicogate.

 

¿Punta Peuco y la Impunidad?

 

Luego que se esperaba el inminente cierre de Punta Peuco, causaron revuelo en los últimos días  las declaraciones del ministro de justicia, Jaime Campos. El gobierno Bachelet no se habría comprometido en cerrarla. Se trata de la cárcel de lujo, destinada exclusivamente a violadores de derechos humanos durante la dictadura.

 

La presidenta Michelle Bachelet y Carmen Gloria Quintana

 

Carmen Gloria Quintana del llamado caso quemados puso de manifiesto su rechazo en carta pública.  Ello dejó en claro que la presidenta Michelle Bachelet si le había prometido que lo haría. La derecha trató de desprestigiarla.

 

Sebastián Piñera, el candidato presidencial derechista (anunciado como posible ganador) manifestó su oposición al cierre de la cárcel de lujo de Punta Peuco. Piñera también hizo suya la promesa de amnistiar los ex agentes de Pinochet por razones de salud mental o ancianidad. Todo indica que si Piñera es presidente, cerrará los casos. Ello se inscribe en respuesta a la carta en El Mercurio de 16 ex comandantes en jefe de diversas ramas de las FFAA y Carabineros: Firmada hasta por uno de los que bombardearon la Moneda en 1973, exigía la impunidad para quienes defendieron la patria.

 

Las organizaciones de DDHH y de víctimas, exigen desde hace años cerrar Punta Peuco. Que los agentes de Pinochet presos cumplan sus condenas en cárceles comunes, que no sean privilegiados. Es una cuestión de equidad fundamental. Si existen problemas en el régimen carcelario, ellos deben resolverse para todos los internos y no sólo para algunos.

 

Carmen Frei, llamó a terminar con los privilegios carcelarios de los condenados por violaciones a los derechos humanos. Lo hizo cuando agregó su padre en la placa que conmemora los ejecutados políticos de la dictadura,

 

Al momento de escribir estas líneas no se sabe si Michelle Bachelet cerrará Punta Peuco.

 

Chile 2017: DDHH: ¿Un tema imprescriptible?

 

La polémica actualizó el tema de la impunidad en el proceso chileno. La doctrina del primer gobierno de la transición pactada, el de Patricio Aylwin (1990-1995), impuso la tesis de la justicia en la medida de lo posible y en casos ejemplares. Para varios, selló la impunidad. Privilegió la Verdad y la Reconciliación (Comisión Rettig). También las reparaciones para esas víctimas, incluidos los exonerados.

 

Ello dejaba los juicios concretos en las manos de los tribunales. Un enfoque justificado por la distancia necesaria entre los poderes del Estado: ejecutivo y judicial.

 

Lorena Pizarro, Presidenta de la AFFDD

 

Paradojalmente, es el poder judicial mantiene viva hoy el tema de la justicia transicional. La amplía incluso a casos de tortura no previstos en la justicia en la medida de lo posible. La imprescriptibilidad de los crímenes de lesa humanidad, pena en Chile. En los laberintos de un proceso político que ha favorecido la impunidad.

 

Y no es el único problema de la falta de voluntad política en la justicia transicional. Se agrega también la condena del secreto de 50 años con que se marcaron de oficio, los 38 mil testimonios de la Comisión Valech, sobre la prisión política y la tortura.

 

También surgen en la campaña la confirmación que el bate Pablo Neruda no falleció de cáncer. Incluida la posibilidad de que le haya lo ocurrido lo del ex presidente Eduardo Frei Montalva. Se recordará que se confirmó su asesinado en enero de 1982. Fue en la Clínica Santa María, por orden de la dictadura pinochetista.

 

Lo cierto es que la derecha sin complejos, encabezada por Kast, hizo del cierre del acoso los militares patriotas un tema insoslayable para Sebastián Piñera. El candidato ultraderechista José Antonio Kast, incluye incluso sacar el busto de Allende de frente a la Moneda. Algunos plantean la importancia de votar para impedir la impunidad.

 

¿Sombras, nada más?

 

Esto confirma para la gran mayoría el doble juego de las instituciones castrenses y la crítica al tratamiento del tema de los DDHH por los gobiernos de la concertación y los que les siguieron.

 

Muchos creemos que una de las condiciones de la transición pactada en 1989, fue no sólo de afectar el protagonismo de los movimientos sociales sino que el que se enfrentara la justicia solo en la medida de lo posible.

 

 

Otros, pragmáticos, estimaron que ello era el costo de una salida pacífica, de la reconciliación de la familia chilena. Era sólo para el momento de transición. Lo cierto es que la historia confirma que se instaló un nuevo sistema político, que hoy está en jaque.

 

En otras latitudes la óptica de la Verdad y la Reconciliación (Suráfrica) permitió pasar a otra cosa. En Chile se mantiene el silencio ensordecedor de la deuda presente de justicia transicional ¡Cuarenta y tres años después del golpe de 1973 y veintisiete de democracia representativa!

 

¿Un tema que ensombrece el proceso chileno?

 

Algunos le atribuyen el individualismo y la limitada percepción sobre los derechos sociales, como lo revela la encuesta del Hogar de Cristo.

 

Otros la ligan a las prácticas de corrupción, desde políticos hasta milicos y pacos, al cambalache siglo 21.

 

 Para otros, el mal enfoque de los DDH explica la aplicación de la ley antiterrorista contra los Mapuche en la Araucanía.

 

Se traduce en el mantenimiento de resabios de tortura en el sistema carcelario. y explicaría la confusión en temas valóricos revelados por encuestas del INDH.

 

En todos los casos, aunque sea un tema del pasado, se confirma que nada se acaba mientras no termina correctamente.

 

http://marcelosolervicens.org/2017/11/derechos-humanos-chile-2017-tema-imprescriptible/#more-1216

 

 

 

 

 

 

https://www.alainet.org/es/articulo/189258
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