En el Caribe reclaman movimientos sociales: ¡Acuerdo humanitario Ya!

02/02/2008
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Con el propósito de llamar la atención del gobierno nacional y de la ciudadanía en general sobre la necesidad de implementar el Acuerdo Humanitario a la mayor brevedad posible en el país, representantes de los diversos sectores sociales del Caribe colombiano se concentraron en la Plaza de la Paz, en Barranquilla, al sumarse a la iniciativa del Día de Acción Global Mundial, que se llevó a cabo el sábado 26 de enero en todo el orbe, por iniciativa del Consejo Internacional del Foro Social Mundial.

Gustavo López Reslen, miembro activo de la Asociación de Jubilados de la Universidad del Atlántico (Asojua), en su intervención, expresó: "Se hace necesario trabajar mancomunadamente entre todos los sectores sociales para la construcción de un nuevo país en el que todas y todos quepamos, así algunas o algunos piensen de manera contraria a la nuestra, sin necesidad de llegar a los extremismos fanáticos a los que nos vemos abocados en estos momentos. Debemos hablar de paz sin pensar en más guerras".

Emma Doris López y Yeimis Isabel Quintero, entre otras activistas de la Red Distrital de mujeres, respondieron puntualmente al llamado formulado días antes en el Foro Social Caribe de participar activamente en la jornada de reflexión sobre la paz en Colombia, sumándose con mensajes alusivos a la pronta implementación del Acuerdo Humanitario a nivel nacional. "Las mujeres somos un activo importante en el país, por lo que decidimos unirnos a la reclamación de la consecución de la paz por métodos pacíficos", puntualizó Emma López. A su turno, la abogada Yeimis Quintero habló acerca de la situación en que se encuentran más de tres millones de colombianas y colombianos víctimas del conflicto armado, sin solución integral de su problemática; "Se hace evidente que la reparación material de las desplazadas y desplazados es un espejismo. Es grave el desconocimiento del acervo inmaterial de las comunidades inmersas en semejantes situaciones. Lo elemental es el retorno a sus lugares de origen, de donde han sido desarraigadas, garantizándoles la vida y la salud, en especial; al igual que los demás derechos fundamentales que, como cualquiera otra persona en el país, deben disfrutar quienes se encuentren en condiciones de desplazamiento".

Heinner Arévalo, Director Operativo de la Corporación Deberes & Derechos, quien igualmente participó en la jornada de reclamo del Acuerdo Humanitario, manifestó: "El conflicto interno colombiano requiere una mirada diferente, novedosa, con amplias alternativas de solución. Sabemos que estamos con muchas incertidumbres, más creer que existe una sola fórmula para encontrar la paz, mediante la guerra, es absolutamente erróneo. Se requiere asimilar los ejemplos de otras naciones que lograron superar situaciones conflictivas al interior de sus fronteras, sin necesidad de continuar la escalada armamentista".

Que se callen los fusiles

Que se callen los fusiles para escuchar plácidamente a niñas y niños en sus rondas infantiles. Basta con las llamadas a la confrontación bélica. "Desmilitaricemos nuestras conciencias" tal como lo pregona por todo el continente el Servicio Paz y Justicia en América Latina-Serpaj. Las declaraciones altisonantes e incendiarias de mandatarios de países vecinos, otrora buenos hermanos, se dejan sentir cual vecinas arrabaleras de pueblo caribeño. Macondo al grado máximo. David Sánchez Juliao y su "Niña Tulia" han quedado chiquitos.

Los medios de comunicación, en su afán de vender sirven de cajas de resonancia de tales improperios, sin rubor de nadie. Voceadores de prensa felices vendiendo ejemplares de los diarios en las calles, alimentando el morbo de incautos clientes. "La guerra es hoy", dice uno; "No, es mañana en la mañana", dice su interlocutora. Mejor dicho, la hecatombe se formó de la nada.

Analizando las actuales circunstancias, nos atrevemos a manifestar públicamente que la mesura es la gran ausente en la mente de "dirigentes políticos", algunos de los gremiales, y más aún, en las salas de redacción. Con el afán de la chiva se divulgan especies de cualquier naturaleza sin sopesar sus efectos y sin consultar otras fuentes. Definitivamente, la tan trillada frase "la primera víctima de cualquier guerra es la verdad" cobra vigencia. Sin demeritar a locutores deportivos, periodistas de farándulas, y a "paisas culebreros" nos percatamos que "reimundo y to´el mundo" habla de "estatus de beligerancia" sin saber que es eso, del acuerdo humanitario como si fuera una comparsa del Carnaval de Barranquilla, e inclusive, hemos llegado al extremo de escuchar entrevistar al Ministro de Agricultura, Andrés Felipe Arias, quien concedió declaraciones sobre dicho estatus de beligerancia, invadiendo terreno de los Ministros de Relaciones Exteriores y del Interior, y de los Embajadores de los países trenzados en disputas verbales sobre el asunto. El Ministro Arias debe limitarse a hablar del ganado vacuno, de los cultivos de papa y demás alimentos de pan coger, de gallinas y pollos, más el tema tan delicado de nuestras relaciones exteriores y del conflicto interno colombiano debe dejarlo en boca de los funcionarios de cada ramo.

Debido a lo comentado, hacemos un llamado general a la cordura. Así como pedimos que se "callen los fusiles", solicitamos que pensemos antes de hablar, sopesemos lo que vamos a decir, en especial a las y los periodistas.

Por favor, sabemos de la premura del tiempo, las exigencias de la profesión y demás aspectos que pudieran actuar en contra de nuestras actividades, propias del oficio o profesión, más jamás pueden constituirse en excusas para informar adecuadamente a la opinión pública que se encuentra ávida cuanta noticia se le transmita. Las colombianas y colombianos de bien reclaman un periodismo serio, comprometido, de altura, con fines altamente dignificantes para la humanidad. Dejar de lado estos aspectos nos conlleva a las manipulaciones que contarían éticamente nuestro hermoso y ejemplar apostolado. El privilegio de escribir, o el de estar frente a un micrófono y a las cámaras de televisión nos hacen más responsables de lo que pensamos en todo cuanto acontece en nuestros alrededores, tanto cercanos como lejanos.
Hablemos de paz en paz.

- Fabio Monroy Martínez, Abogado-Periodista.
Fuente: Semanario Virtual Caja de Herramientas
Corporación Viva la Ciudadanía.

www.vivalaciudadania.org

https://www.alainet.org/es/articulo/125537
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