Libia: ¿Y si en vez de Roma es Beijing?

24/02/2015
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
-A +A

 

Ya no es un secreto para nadie que Libia tal como se la conoció hasta febrero de 2011, ya no existe y muy posiblemente jamás vuelva parecérsele y ni siquiera que vuelva una verdadera nación. Las acciones terroristas que desarrolló la OTAN en nombre de occidente han demolido un país en pleno desarrollo para convertirlo en un estado fallido.
 
Desde estas páginas hemos destacado los logros de la revolución Yamahiriya o el Estado de masas, que durante sus cuarenta y dos años de desarrollo, quizás haya sido el modelo revolucionario más exitoso de la historia.
 
Sin dudas tantos logros fueron su propia acta de defunción. Occidente, los grandes bancos de occidente, temían a un gigantesco traslado de fondos libios a bancos chinos, que iba a representar una hecatombe para muchos de esos bancos occidentales ya muy vapuleados por sus propias torpezas y avaricia desde el 2007.
 
Libia hoy se debate entre bandas de contrabandistas, narcotraficantes, traficantes de personas, una clase política sin nada de poder político y mucho menos de clase.
 
Como si todo esto fuera poco, muchos de los hombres que representaban a al-Qaeda local, que inicialmente se conoció como El Grupo Islámico de Combatientes Libios (GICL), se desperdigaron en otras formaciones salafistas compuestas también por muchos de los mercenarios que el príncipe saudita Bandar al-Sultán exportó a Libia, para ayudar a derrocar al coronel Gaddafi. Una de ellas la más importante durante este último tiempo fue Ansar al-Sharia cuyo líder, Mohamed al-Zahawi, murió en combate a fines de enero.
 
Ansar al-Sharia que se asienta en la ciudad de Benghazi, fue la organización que ejecutó al embajador norteamericano Chris Stevens en septiembre de 2012. Un sector importante de esos grupos wahhabitas juró lealtad al nuevo messenger boy del Departamento de Estado, Abu Bakr al-Baghdadi, últimamente conocido por el alias de Califa Ibrahim, líder indiscutido del Estado Islámico Global.
 
Desde agosto último han establecido la wilayat (provincia) de Derna, una ciudad de cien mil habitantes, próxima a la frontera con Egipto, donde impusieron la sharía, comenzando a provocar infinidad actos de barbarie. Inquietos, como suelen ser, sus acciones han llegado a la ciudad de Trípoli, a casi mil cuatrocientos kilómetros, donde atentaron en el Hotel Corinthia, dejando una docena de muertos e impidiendo se concrete una reunión entre representantes de los dos parlamentos que funcionan en paralelo en Trípoli y en Tobruk, que todavía no han logrado legitimizarse, ni frente al mundo, ni mucho menos al pueblo libio, también atentaron contra la embajada de Irán en Trípoli, afortunadamente sin dejar víctimas.
 
Estado Islámico además de la ciudad de Derna, ha ocupado Sabrata al oeste y Sirte en el centro. Donde hasta realizan desfiles militares para festejar logros como el atentado en la localidad de al-Qubba, que causó cuarenta y ocho muertos.
 
Pero, más allá de todo, saltaron nuevamente a la consideración mediática, tras la decapitación de veintiún egipcios, cristianos coptos, que habían capturados en la ciudad de Misurata, a mil kilómetros de Derna.
 
Estado Islámico, no ha tenido inconvenientes para movilizar sus hombres a pesar de los bombardeos egipcios, como devolución por las decapitaciones. Los califados de Ibrahim, subieron la apuesta y ahora tienen secuestrados a otros treinta cuatro trabajadores egipcios, que ha prometido ejecutar próximamente. Los hombres de Ibrahim ha fundado varios campos de entrenamiento el más conocido es el de Nofliah, en la cercanías de Sirte, lugar de nacimiento y martirio del Coronel Gaddafi. Esto motivo que algunos analistas y servicios de inteligencia europeos, señalan al gaddafista Hasan al-Karami, uno de los redactores del mítico Libro Verde, como el nuevo líder de Estado Islámico en Libia.
 
Contabilizar las acciones de Estado Islámico y otras organizaciones similares, que se realizan a diario en Libia, es prácticamente imposible, occidente parece acostumbrarse solo a relatar los acontecimientos como si no tomase consciencia de que todo esto esta pasando a quinientos kilómetros de Sicilia, que por si alguien no lo sabe es Europa, por lo menos por ahora.
 
Estado Islámico no es la única organización armada en Libia, de entre las mil setecientas que se han contabilizado, sin dudas las más importantes son las del clan Zintan de tendencia liberal, asentada en la Cirenaica, cuyo centro de acción es la ciudad de Benghazi, que han tenido fuertes enfrentamientos con Ansar al-Sharia y otro en la Tripolitania, constituido por el clan de Misurata, más inclinados al integrismo religioso, sin llegar al extremo de Estado Islámico.
 
La vida a cuatrocientos kilómetros
 
Para cientos de miles de libios y africanos en general, la vida esta a cuatrocientos kilómetros del puerto de Misurata, la isla de Lampedusa la puerta de entrada a Italia o la vida.  
 
 Los campos de refugiado ya suman medio millón de africanos en su mayoría provenientes de Mali, Sudán, Etiopía, Eritrea, Somalia, entre otros, se calcula que otros doscientos mil ya en Libia todos buscando un lugar en los barcos que intentan cruzar el Mediterráneo desde algún punto de los casi dos mil kilómetros de costa que Libia tiene sobre el Mediterráneo, para llegar a Europa, especialmente a Italia.
 
Más de ciento setenta mil inmigrantes llegaron a Italia en barco en 2014, sin contar los cinco mil ahogados. Este año ya son más de mil los que murieron en el intento de encontrar una vida mejor, o por lo menos una vida.
 
El tráfico de personas se ha constituido en uno de los grandes negocios en el sur del Mediterráneo. Los buques, son cargados de la “mercancía” y se los lanza a la deriva, sin tripulación o en los casos que la lleven los abandonan apenas la nave este en rumbo, para que los equipos de rescate europeos se hagan cargo. Por lo que la Agencia Europea de Frontera (Frontex) ha puesto en marcha la operación Tritón y ha otorgado a Italia trece millones de euros para que pueda controlar la situación que parece hoy imposible tenga un fin. Italia tiene su propio plan de contingencia la Operación “Mare Nostrum”, iniciada en octubre de 2013 y que le significa casi trescientos cincuenta mil euros al día.
 
Conocedores de esta situación, las bandas salafistas amenazan con enviar quinientos mil nuevos inmigrantes donde irían, infiltrados, comandos para atacar dentro de Europa.
 
El jefe del grupo que decapitó a los coptos, anunció que el próximo objetivo será Roma, por eso llama la atención la dilación de la OTAN, comience acciones realmente serias en Libia para exterminar la presencia de Estado islámico y de al-Qaeda.
 
Un amigo lejano
 
Libia ocupa un lugar estratégico para que se articulen otros grupos salafistas que actúan en muchos de los países fronterizos y no tanto. Existe presencia de estas bandas en Túnez, Argelia, Níger, el Chad, Sudán, pero también en toda la franja del Sahel, Somalia, Eritrea, Etiopia, República Centro Africana, Camerún, Mali y Nigeria con el grupo estrella Boko Haram, de poder consolidarse una confederación de “califatos” la situación se convertiría definitivamente en incontrolable para occidente. Una extensión territorial gigantesca además infinitamente rica en recursos naturales. Por eso es tan sugestiva la parsimonia de Europa y los Estados Unidos en arremangarse y poner manos al problema, a no ser que tuvieran la certeza de que no se atreverán a saltar el Mediterráneo y de pronto decidieran que los verdaderos enemigos del Islam no son los “cruzados” sino las fuertes inversiones chinas.
 
Desde los años cincuenta China ha iniciado una corriente de seducción respecto a África, y como el mundo sabe, nadie para construir con el tiempo que China, por eso no es casualidad que el presidente Xi Jinping, haya elegido África como destino de su primer viaje oficial, después de Rusia.
 
El Primer Ministro chino Li Keqiang, visita con frecuencia el continente a donde lleva siempre nuevas inversiones, como lo ha declarado más de una vez “Frente al olvido de  Occidente, Beijing demuestra así la importancia de África”.
 
A Etiopía, Angola, Nigeria y Kenia, le fue otorgada una línea de crédito de diez mil millones de dólares y otros dos mil millones destinado a financiar proyectos para el desarrollo. En su gira el presidente Xi Jinping ordenó partidas que sumaron veinte mil millones de dólares para infraestructuras construidas por empresas chinas.
 
Y declaró: “Tengo el sueño en el que todas las capitales africanas están conectadas con ferrocarriles de alta velocidad para potenciar así la comunicación y el desarrollo”.
 
La mitad de la ayuda China al extranjero esta destinada a África “sin precondiciones”.
 
Desde 2009, China se ha convertido en el principal socio comercial de África. En 2013 el intercambio comercial alcanzó los 210.000 millones de dólares al tiempo que la inversión directa se multiplicó por treinta en los últimos diez años. Las inversiones chinas han generado cien mil puestos de trabajo, y casi tres mil empresas chinas comercian hoy con distintos países africanos en áreas como finanzas, comunicaciones, energía, manufacturas y agricultura. Durante 2013 se firmaron contratos por cuatrocientos mil millones de dólares y se construyeron dos mil quinientos kilómetros de vías férreas y tres mil quinientos de autopistas.
 
Estado Islámico y al-Qaeda han fungido siempre como la mano de obra del Departamento de Estado, no es casual, que nunca hayan atacado países visceralmente pro norteamericanos como son Arabia Saudita y las Petro monarquías del golfo, Israel, Jordania, Turquía y en África, Marruecos. Por eso sería muy difícil que intentaran abrir una sucursal del Estado islámico en el Trastvere, pero si, por ejemplo, que intentaran interferir en los negocios chinos.
 
Foto: RT 
 
 
https://www.alainet.org/es/articulo/167745
Suscribirse a America Latina en Movimiento - RSS