Comunicación y derechos humanos

Los excluidos: un reto para la radio popular

29/09/1997
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La Asociación Latinoamericana de Educación Radiofónica, ALER, una entidad que agrupa a más de 100 experiencias de radio popular de la región, celebró en el mes de septiembre, sus 25 años de vida. Con este motivo se reunió en Quito Ecuador, sede de ALER, el Seminario Internacional Radio y Cultura que congregó a directores de radio de 17 países y en el que participó el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, cuya exposición reproducimos a continuación. La humanidad en este final de siglo ha dado pasos que hasta hace muy poco tiempo parecían imposibles de alcanzar. Los avances tecnológicos y científicos han puesto en manos del ser humano las posibilidades de resolver problemas antes insolubles, pero su utilización está seriamente comprometida. Las tecnologías han permitido el acercamiento global en las comunicaciones y lo que hoy ocurre en un lugar remoto de la tierra tiene repercusiones inmediatas en otras partes, en el medio donde nos encontremos. La época que vivimos nos sorprende con sus vertiginosos cambios, cada día más acelerados y sorprendentes. A la vez, si bien en gran medida es un avance, por otra parte estamos sometidos al bombardeo informativo y muchas veces a la manipulación que determinados medios hacen de esos espacios. Poder económico e información Se necesita conciencia crítica y capacidad de discernimiento para poder evaluar la información. En el plano internacional, los intereses económicos y políticos manipulan los medios informativos, las grandes empresas informativas no son asépticas, responden a determinados intereses económicos y políticos y regulan la información a través de esos intereses. Quiero poner como ejemplo, la Guerra del Golfo Pérsico, donde los grandes medios mostraban los avances tecnológicos bélicos y la precisión de tiro de las fuerzas aliadas, pero ocultaban la muerte de 175 mil personas, la mayoría civiles, mujeres y niños. Es decir mostraban una guerra aséptica, sin muertes, ocultando la verdad. Otras veces, los grandes medios de comunicación muestran la situación de vida y conflictos de los pueblos, como los Grandes Lagos de Africa, la miseria, las masacres, los miles de refugiados y desplazados internos, en Burundi, el Zaire y Ruanda, los medios informativos nos traen los rostros de millones de personas concretas que viven y mueren en situaciones extremas y a quienes les han arrebatado el derecho de vivir con dignidad, o la situación de esos millones de niños a quienes se les ha condenado a una muerte prematura. na bomba más poderosa que la de Hiroshima En el mes de diciembre del 96, presenté, en la reunión de Premios Nobel, en Milano Italia, una ponencia sobre el "Hambre, la Bomba Silenciosa", un flagelo que mata a mas personas que una guerra. Decía en esa conferencia que, recordando a Josué de Castro, el sociólogo brasileño que en la década del 60 publica una obra fundamental, "La Geografía del Hambre", que hay temas que son tabú, que casi no se mencionan en los medios de comunicación, y que de cada mil publicaciones, referentes a los problemas de la guerra, puede contarse un trabajo acerca del hambre. Entre tanto, los estragos producidos por ésta última calamidad son mayores que los de las guerras y las epidemias juntas, como puede deducirse de las escasas referencias existentes acerca del problema. El grito desesperado y las miradas silenciosas de los desposeídos claman un poco de comprensión y caridad a los que detentan el poder. Si tomamos en cuenta las estadísticas oficiales que bien sabemos, nunca son las reales, la desnutrición afecta actualmente a 841 millones de personas, 25 niños mueren de hambre cada minuto en el mundo. Al finalizar la conferencia de la FAO y este encuentro que estamos aquí realizando, 180 mil niños habrán muerto por falta de alimento en el mundo, unos 25 por minuto y 13 millones al año. Una verdadera bomba silenciosa que estalla en la mente y en los corazones de toda la humanidad. La deuda externa de América Latina ha aumentado al finalizar 1996 a 620 mil millones de dólares, hay un aumento vertiginoso año a año. En 1995, la deuda era de 587 mil millones de dólares, el aumento continúa sin solución y agravándose dejando a los pueblos en la miseria, en la desigualdad y en el aumento del hambre. El teólogo brasileño Leonardo Boff, señala que, el sistema exige cada dos días, un Hiroshima y un Nagasaki, inmolando diariamente a más de 100 mil personas en el altar del dios Mammon, es decir del dios del mercado. Si observamos la proyección de la situación actual, evidentemente es preocupante y dramática. Los países pobres continúan empobreciéndose y transfiriendo capitales a los países ricos. Se ha implementado una nueva forma de dominación y sometimiento de los pueblos. En éste final de siglo, se cumplirán 50 años de la declaración Universal de los Derechos Humanos proclamada por la ONU, hecho trascendente que fue una respuesta de la humanidad a las atrocidades y calamidades desatadas por la Guerra Mundial. Se necesitaba un código de conducta que oriente y asuman sus responsabilidades los Estados. Sin embargo las graves violaciones de los derechos humanos no han determinado, muchos gobiernos que firmaron y ratificaron los Pactos, Convenciones y Protocolos, continúan violando los derechos humanos, aún aquellos que se dicen democráticos porque se vota. El voto no garantiza que se viva en democracia, sino se logra el derecho e igualdad para todos. Los DD.HH. son indivisibles de la construcción democrática. La radio y el "Obispo de los Indios" Permítanmen recordar aquí al hermano, amigo y maestro, quien en su compromiso junto a los pobres, a los más marginados y necesitados dedicó su vida desde la fe, el Obispo de los Indios Leonidas Proaño, acaban de cumplirse nueve años de su partida hacia el Padre. Fue uno de los grandes defensores de los DD.HH. en particular de los pobres y marginados, nuestros hermanos indígenas. Su lucha por la vida y la dignidad de los pueblos, iluminó caminos de liberación, desde la educación, la organización y el protagonismo de los pueblos. Muchas veces en esas convenciones fraternas de hermanos, me decía la importancia que le asignaba a las comunicaciones y en particular a la radio. Puso especial atención a la Escuela Radiofónica Santa Rosa, de educación a distancia en Riobamba, un medio necesario en la que posibilitaba compartir conocimientos e informar, generando conciencia crítica y que las comunidades tengan elementos para su correcto discernir de los verdaderos valores y los antivalores, como de la situación de vida del pueblo. Decía que los indígenas tenían que descubrir sus propios valores, su cultura, su identidad de ser pueblos. El camino es largo y plagado de dificultades, muchas veces se transita entre luces y sombras, pero son los pobres los protagonistas de sus propias vidas e historia y lo asumen cuando dejan de ser espectadores y se asumen como protagonistas, en la resistencia cultural, espiritual y política, en saber generar alternativas socio-económicas. Los excluidos y el Dios Mammon Los pobres, los marginados, a quienes hoy denominan los excluidos del sistema, no tienen acceso a los grandes medios de comunicación social. El sistema neoliberal genera día a día mayores sectores empobrecidos al quedar excluidos y sometidos a los grandes centros de poder, violando los derechos humanos de las personas y los pueblos. Esta situación no tiende a disminuir, sino a agudizarse, con otra categorización aún más dramática y son los que denomino, "los descartables", es decir aquellos que no tienen posibilidad alguna de ser integrados al sistema, en ninguno de sus aspectos y necesidades. Dentro de esta situación se ubican a los pobres, a los ancianos, los indígenas, a los jóvenes que al sistema social no les interesa, a los niños en estado de riesgo social, los chicos de la calle. Para el sistema no son "reciclables". La política del mercado, es sumar y restar, sin posibilidad social, el Amor está ausente. El sistema ha entronizado al Dios Mammon, es decir al Dios del Mercado que nació sin corazón. Los límites del asistencialismo Recuerdo a otro amigo de caminada en América Latina, hoy muy anciano, un hombre que dedicó su vida a los desposeídos, un profeta de América Latina, me refiero a Don Helder Cámara, el Arzobispo Emérito de Olinda y Recife, quien decía que: Cuando él daba limosna a los pobres y los consolaba de sus miserias, todos decían "Ese hombre es un santo". Pero cuando comenzó a preguntar ¿por qué había pobres? Muchos lo atacaron y decían: "Es un obispo subversivo y comunista". Conocemos demasiado bien esa historia en nuestro continente. Cuando al Madre Teresa fue a Cuba y dijo que allí los niños tenían un lugar privilegiado y que todos tenían salud y educación, hubo sectores que le atacaron y decían: "Esa monja es una subversiva comunista". Cuando se hace asistencialismo no se cuestiona y denuncia el sistema de injusticia, los que mandan están contentos de tener la colaboración de aquellos que hacen, lo que ellos no son capaces de hacer. La asistencia en ciertas circunstancias es necesaria con los más desvalidos y la caridad no puede estar ausente, hablo de la caridad del Amor. Pero cuando el asistencialismo se ejerce por intereses políticos y para lavar culpas, termina despersonalizando a los pobres y sometiéndolos a la dependencia, esto es una ofensa a los pobres y a toda la humanidad. Abrir la puerta a la esperanza Estamos en el umbral del final del siglo XX y debemos asumir los desafíos que el momento actual nos demanda, porque lo que hoy tengamos el coraje de sembrar, es los que vamos a recoger y dejar como legado a nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos, que han de vivir y construir el Tercer Milenio de la Humanidad. Es necesario trabajar y abrir la puerta de la Esperanza, hacia la Libertad y la construcción del Estado de Derecho, en que la Democracia en el hacer cotidiano, llegue a generar igualdad para todos. Hoy ese derecho está negado a las mayorías y se percibe en el horizonte, la amenaza de la "Dictadura del Mercado", en esta llamada globalización, que lleva a la pérdida de las identidades de los pueblos, en una manifestación cultural consumista. La gran concentración de los capitales se encuentra en pocas manos y la mayoría de los pueblos quedan indefensos frente a la exclusión del sistema. Para alcanzar la libertad es necesario una gran dosis de rebeldía, de resistencia cultural, la resistencia espiritual, social y política, caminos posibles de construir sociedades más justas y humanas. En que los derechos humanos y derechos de los pueblos sean una realidad. La importancia de las radios comunitarias como medios alternativos, las redes de comunicación como lo que ALER ha logrado construir, y en su larga experiencia al servicio de los pueblos, es generadora de caminos que permitirán abrir los espacios de participación y responsabilidad social. Todo vivimos y luchamos por una utopía, muchas de esas esperanzas quedaron en el camino y se derrumbaron en las frustraciones o en la imposibilidad de hacerlas realidad, pero si las utopías no existen , tenemos que tener el coraje de inventarlas, no es posible pensar y vivir sin ideales, sin utopías, sin horizontes y amaneceres, en que podamos compartir el pan y la libertad con nuestros pueblos. La larga lucha y experiencia en defensa de los derechos humanos, nos ha enseñado la importancia de los medios de comunicación alternativos, de las radios comunitarias, de esas redes que participaron de la resistencia a las dictaduras militares que asolaron a nuestro continente. Vivimos experiencias creativas en la resistencia. Recuerdo, que incluso les poníamos nombres a determinadas formas de comunicación, como la "noticia de ping-pong", es decir la noticia del rebote, salían de nuestros países, acosados por la censura y las persecuciones, a través de los medios periodísticos de la resistencia, enviaban la noticia fuera del país y esperábamos el rebote de la noticia y generaba los "agentes multiplicadores". Ese accionar permitió salvar muchas vidas y mostrar y denunciar al mundo la situación de los derechos humanos y vida de nuestros pueblos bajo las dictaduras militares. La educación es el camino de crecimiento de los pueblos, en el desarrollo de la conciencia y participación, no basta informar. La educación tiene como objetivo central, generar conciencias de hombres y mujeres para la libertad, de la solidaridad y la paz. Democracia de papel Todos tenemos conciencia que la lucha por la vida y la dignidad de nuestros pueblos no terminó, hoy estamos en otra etapa aún más compleja y difícil, cuando se dice que en nuestros países se vive en democracia, porque se vota cada cuatro o seis años. Ya señalé, muy rápidamente la situación de vida de nuestros pueblos, la dependencia social y económica, la tremenda e injusta deuda externa que viola los derechos humanos y de los pueblos. Aún hoy, en muchos países que se dicen democráticos se continúan violando los derechos humanos, tenemos como ejemplo a Perú y Colombia, que han implantado la justicia sin rostro, jueces ocultos que imparten sentencias sumarias y arbitrarias, masacres, torturas, desaparición de personas. En Chile sigue al frente de las FF.AA. el ex dictador Pinochet y se aseguró el cargo de Senador vitalicio. En Argentina la impunidad impera en las estructuras del Estado y hoy alguno de esos represores ocupan cargos oficiales. En Brasil la persecución y en muchos casos asesinatos de campesinos sin tierra, de meninos de rua, entre muchos otros países que dicen ser democráticos. Si echamos una mirada a nuestro continente veremos la gravedad en que vivimos. La impunidad jurídica, tanto de aquellos represores que violaron los derechos humanos, como los delitos de corrupción, la mayoría de esos responsables están en libertad. Existe la impunidad económica y la falta de control y sanciones para aquellas empresas que cometen esos delitos, ya sean nacionales, como las multinacionales que están llevando a nuestros países a la pérdida de sus soberanías. En el día de ayer participé en Brasilia, de un Congreso Internacional de Derechos Humanos. Traté el problema de la impunidad en América Latina y la necesidad de encontrar instrumentos que pongan fin a ese mal. La ONU viene trabajando en diversas comisiones, como muchos organismos no gubernamentales sobre la necesidad de construir un Tribunal Penal Internacional Permanente, a fin de juzgar los delitos de graves violaciones de los DD.HH. Esperamos que esto llegue a ser una realidad para el año 2.000 Comunicación al servicio de los pueblos Es necesario que desde el lugar y las posibilidades que los medios alternativos disponen, estén al servicio de los pueblos, en cuanto el ejercicio periodístico esté dirigido a la información veraz y a la concientización de la población. Es necesario hacer memoria, es la historia viva de los pueblos, no para quedarnos en el pasado, sino que esa memoria nos ilumine el presente que nos permitirá construir y proyectar el futuro. ALER viene bregando y construyendo espacios de participación durante 25 años de servicio a la comunidad. Quiero terminar esta breve exposición deseándoles lo mejor, mucha fuerza y resistencia junto a los pueblos y que la red de educación radiofónica, se vaya fortaleciendo en bien de la verdad y la justicia, caminos que nos llevarán a alcanzar la paz y convivencia en la diversidad y la unidad entre los pueblos.
https://www.alainet.org/es/articulo/104398
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