Las siguientes declaraciones de Manuel Zelaya, desde San José Costa Rica, fueron recogidas el domingo en la mañana por TeleSUR, vía telefónica.

Buenos días. Estoy en san José Costa Rica, he sido víctima de un secuestro de parte de un grupo de militares hondureños. No creo que el ejército esté apoyando esto, creo que ha sido un complot de una élite voraz, que lo único que desea es mantener este país aislado, en un extremo de pobreza y la cúpula de la fuerza armada me ha traicionado, han invadido mi casa a balazos, rompieron los portones, me empujaron con las bayonetas, me amenazaron con dispararme, es un secuestro brutal que han hecho sin ninguna justificación contra el deseo de instalar un proceso participativo.-….

No se puede justificar una interrupción de la democracia, un golpe de Estado. Si el pueblo hondureño me está escuchando……, aunque han interrumpido los servicios que están en manos de la empresa privada.

Sé que hay resistencia. A mi me despertaron los balazos, los gritos de mi guardia. Estoy en Costa Rica en ropa de dormir. Estaba comunicándome por teléfono y me conminaron a dejar de hacerlo. Les dije que depusieran esa actitud pero no atendieron a mi llamado. Me subieron a un vehículo y luego a un avión.

Agradezco a Costa Rica su hospitalidad. He hablado con el presidente de Costa Rica y se ha puesto a la orden.

Pido a los presidentes de América y de los EE.UU que se pronuncien. Si estados unidos no está detrás de este golpe, le debe negar el apoyo a estos golpistas.
He estado hablando con los presidentes de América. Hay convocada una reunión de presidentes para mañana en Nicaragua. El presidente Chávez me ha llamado para ponerme a la orden el transporte para ir a Managua. Los presidentes deben ponerse en alerta porque defender a Honduras es defender la democracia.

Insulza que llegue mañana a Honduras y haga valer la defensa al orden y el derecho de Honduras. Ya antes lo intentaron antes con el presidente de Venezuela. Si esto se permite, estará empezando el sufrimiento y el dolor para América Latina.
Estoy en el aeropuerto de San José con algunos ministros de Costa Rica, el embajador de Nicaragua y de Venezuela, la prensa internacional.

Siento mucho pesar por el pueblo de Honduras. A ellos les pido calma pero también que hagan valer sus derechos, hay formas de desobediencia civil.

Llamo a todos los sectores y fuerzas progresistas del país, a la Iglesia Católica, a pronunciarse. No es posible que se permita una interrupción del avance de la democracia en Honduras porque una elite quiera seguir manoseando los intereses del país.

A la gente del pueblo, a los manifestantes, deben respetarlos. Proponer un diálogo para restituir la paz democrática.

A los soldados, no permitan que se perpetúe este crimen en Honduras porque después todos los van a padecer.