ENDE refundada exportará energía eléctrica a países vecinos de Bolivia

06/01/2007
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Energía eléctrica es comodity o manufactura con valor agregado y que además tiene precio internacional en alrededor 12 centavos dólar el kilovatio-hora ( Kwh ). Bolivia puede producir energía eléctrica en grandes cantidades, tan grandes como requiere el mercado demandante de los países vecinos. Su valor agregado respecto al gas, por ejemplo, es de dos a uno aproximadamente. La estatal Empresa Nacional de Electricidad (ENDE), antes de ser capitalizada o privatizada en 1996, producía y transportaba electricidad desde sus plantas en Guaracachi, Corani y Valle Hermoso, tanto en forma termo- como hidroeléctrica.

Esto quiere decir que si las reservas actuales de gas natural boliviano evaluadas en casi 50 TPC, se las vendiera a 5 dólares el MPC, se tendría un ingreso global de 250 mil millones de dólares en 60 o 70 años que tomaría vender estas reservas probadas y probables a los mercados vecinos. Sin tomar en cuenta los líquidos que acompañan que podrían hacer subir esta suma a más de 350 mil millones de ingresos brutos.

Pero en la hora actual de industrializar el gas ingresos podrían hasta quintuplicarse en caso de convertirlo en diesel y gasolina ecológica, metanol, etanol, DME, olefinas, polímeros, fertilizantes y otras manufacturas petroquímicas o industriales. En caso de convertirlo sólo en electricidad mediante uso de termoeléctricas, ya este valor bruto como materia prima se podría simplemente duplicar, que de todos modos significa ya el comienzo de industrialización y conversión del gas natural - que no es comodity en sí como tal, o sea que no posee precio internacional y depende de negociaciones periódicas entre partes como sucede actualmente de Bolivia con Brasil y Argentina - en comodity o manufactura de libre comercio, es decir de libre oferta y demanda.

El viceministro de electricidad Jerjes Mercado ha declarado su intención - y por tanto la del gobierno del presidente Evo Morales - de exportar energía eléctrica a países vecinos por mil millones dólares, y muy especialmente a Brasil, Perú y Argentina. Paraguay produce energía eléctrica y Chile debería negociar antes puerto y salida soberana al mar para Bolivia.

Esta noticia es la mejor que puede dar el gobierno al pueblo boliviano en 2007, debido a que desde 2003 éste ha reclamado con todas sus fuerzas y en forma insurreccional directa por nacionalización de hidrocarburos e industrialización respectiva, incluyendo producción masiva de energía eléctrica para consumo endógeno y exportación. Bolivia misma no se abastece con toda la cobertura necesaria en electricidad en hogares citadinos, y mucho menos alcanza a dar cobertura energética al 100% de familias del área rural. La industria sufre igualmente.

El bajo consumo energético per-cápita es parte del subdesarrollo crónico de Bolivia en primer lugar y de Brasil en segundo. Aproximadamente consumo per-cápita boliviano es diez veces menor al brasileño y este es diez veces menor que norteamericano. Cada boliviano consume energía eléctrica diez veces menos que cada brasileño y cien veces menos que cada estadounidense, de la misma forma que cada brasileño consume diez veces menos que cada norteamericano.

El primer requisito lógicamente es refundar ENDE, del nivel actual llamado residual y por lo tanto sin el marco jurídico necesario para intervenir en la generación eléctrica, transporte y comercialización, a otro de empresa moderna funcionando con atribuciones necesarias para intervenir en todos segmentos del mercado y generación de energía, tal como ya actúa YPFB. El gobierno nacional necesita prestar atención a ENDE tal como lo hizo con YPFB y procurarle un nuevo marco legal para modificar la actual Ley de Electricidad en el sentido analizado.

Las exportaciones que deba llevar a delante ENDE de electricidad en realidad son complementarias a las de YPFB, ya que la materia prima gas natural pertenece a esta empresa. A YPFB le conviene participar con ENDE en la generación de energía eléctrica para obras importantes en curso como hornos eléctricos de producción acero en Mutún, transporte eléctrico ferroviario, minas y fundiciones, agro-industrias, industrias de transformación y otros emprendimientos. Pero especialmente para exportar a países vecinos que reclaman y necesitan energía eléctrica. Hidroeléctricas de gran capacidad sobre ríos Madera, Beni, Mamoré y Guaporé deberían encararse como empresas mixtas latinoamericanas y no solamente de ENDE.

Igualmente la zona andina boliviana desnivelada y arrugada per-se, tiene - según estudios de empresas consultoras internacionales - potencial para instalar inmediatamente hidroeléctricas, tipo empresa privada Takesi, de hasta 300 millones Kw. Casi doble de capacidad ya instalada que posee el Brasil moderno y más de toda la capacidad instalada actual en Sudamérica. EE.UU. sin embargo supera los 1.500 millones de Kw instalados, pero es posible nivelarse pronto.

Analizando el mercado brasileño que crece 5% anual, se necesitaría construir plantas termo- e hidroeléctricas de ocho a diez millones de Kw potencia año. Su potencia instalada actual es de 160 millones de Kw. Si este mercado de expansión anual brasileño se otorgara a Bolivia en una cantidad de sólo 10%, ENDE debería construir plantas de generación eléctrica de un millón de Kw cada año. Exactamente la capacidad total que tiene instalada actualmente Bolivia.

Esta tarea no es fácil y requiere que ENDE refundada como YPFB se unan entre sí y constituyan empresas mixtas, para este propósito de generar energía eléctrica con las inversiones adecuadas y pertinentes, tanto con prefecturas, sub-prefecturas, municipios, cooperativas tipo CRE o FECOIHBOL, comunidades campesinas, como con COFADENA de FF.AA., CER-Riberalta, privados, etc. Pero también con empresas estatales del sector en América Latina como ISA Colombia, CF México, Electrobras y otras muchas más. Es posible también que PDVSA, PETROBRAS, ENARSA y PEMEX, decidan participar en el negocio energético junto a ENDE.

La creación de PETROANDINA entre YPFB y PDVSA y PETROSUR no debe perder de vista que la generación de energía eléctrica es parte también de la planificación energética que necesita la región latinoamericana. Soberanía productiva 2007 como nuevo consenso bolivariano entre países - en vez del inútil y envejecido consenso de Washington 1990 – comienza con la seguridad y complementación energética.

Empresas chinas, hindúes y rusas también desean constituir empresas mixtas con ENDE igual que con YPFB. Por ejemplo, NGT Holding rusa desea producir gas criogénico líquido en Chapare o GNL para distribuirlo a cada provincia de la centena que posee Bolivia. Este gas líquido criogénico es base para producir energía eléctrica en cada pueblo fronterizo boliviano, como en más de 3 mil kilómetros de frontera boliviano-brasileña. Así nuevos pueblos y ciudades como Cobija, Bolpebra, Riberalta, Guayaramerín, Santa Ana Yacuma, Trinidad, San Matías, Puerto Suárez, Villamontes, Yacuiba, Villamontes, Uyuni, Guaqui, San Buenaventura y otros muchos más se encontrarían con una vocación tecnológica, junto a municipios y empresarios, exportando electricidad en forma creciente a industrias de países hermanos vecinos.

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