Igor Felippe: “Lula es un preso político, si no estuviera detenido sería presidente”

09/04/2019
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 Lula cumplió un año en la cárcel y sus seguidores se movilizaron en decenas de Estados de Brasil y varias ciudades del mundo. Igor Felippe, coordinador de la campaña internacional “Lula Libre” dialogó con 0223 Radio.

 

Este domingo se cumplió un año desde que el ex presidente Luiz Inazio Lula Da Silva fue detenido en la Superintendencia de la Policía Federal de Curitiba por haber adquirido presuntamente de manera ilegal un Triplex en la zona de Guaruja, Sao Paulo y estar acusado comandar una asociación ilícita que se favoreció con la corrupción.

 

Desde entonces, seguidores, abogados y dirigentes políticos de diversas organizaciones políticas, sociales y sindicales destacaron la falta de pruebas para demostrar el delito y empezaron a denunciar una ofensiva del poder judicial contra su figura. 

 

De esta manera se conformó la campaña "Lula Libre" con el objetivo de organizar Comité de apoyo en todo Brasil y el mundo y concientizar sobre la condición de preso político del exmandatario que fue inhabilitado para presentarse a las elecciones del año pasado cuando lideraba todas las encuestas-

 

En ese marco, 0223 Radio dialogó con Igor Felippe, dirigente del Movimiento Sin Tierra (MST) y Coordinador de la secretaria operativa de la Campaña Internacional "Lula Libre" que organizó diversas actividades en apoyo al líder petista. Felippe remarcó que "Lula es un preso político", analizó los 100 días del gobierno de Jair Bolsonaro y opinó sobre Sergio Moro, juez que condenó a Lula y hoy es ministro de justicia. 

 

-¿Qué significa la prisión de Lula?

 

La prisión de Lula significa la ofensiva de las fuerzas de derecha conservadora contra el pueblo brasilero, las libertades democráticas y la soberanía nacional. Lula es un preso político porque si no estuviera detenido sería el presidente de la república.

 

Entonces, desde 2015-2016 hay una ofensiva de las fuerzas conservadoras que hicieron un golpe contra Dilma, luego la prisión de Lula sin pruebas que lo conecten con un delito y finalmente la elección de Bolsonaro marcada por una guerra cibernética y fakenews. La prisión de Lula es un elemento clave para esta ofensiva contra los trabajadores

 

-¿Qué se puede decir de Sergio Moro?

 

Sergio Moro fue premiado con un ministerio y dicen que será nominado para ocupar un lugar en el Supremo Tribunal Federal producto de la guerra judicial contra Lula y la izquierda. Moro es un artífice del golpe de la derecha y el imperialismo contra Brasil.

 

 -¿Complica la posibilidad de liberación de Lula que Bolsonaro sea presidente?

 

La victoria de Bolsonaro y la designación de Moro como ministro de justicia, marca una correlación de fuerzas adversa en la lucha de clases en Brasil. Esta situación es bastante desfavorable para los sectores populares.

 

En nuestro país hay una articulación en el gobierno de militares, "lavajistas" con todos los actores del poder judicial y conservadores fundamentalistas evangélicos.  Esta situación nos pone en dificultades, no solo para la libertad de Lula sino también para la defensa de los derechos de los trabajadores y la defensa del estado en contra de las privatizaciones.

 

Sin embargo, estamos asistiendo a muchas contradicciones de este gobierno. En primer lugar había una expectativa muy grande respecto del compromiso de nuevo gobierno para combatir la corrupción pero tenemos a la familia de Bolsonaro envuelta en esquemas de corrupción con relación con las milicias que controlan territorios en Río de Janeiro y al partido oficial involucrado en ilícitos como el de lanzar candidaturas falsas para quedarse con los fondos electorales. También hay contradicciones en el rumbo económico, el desempleo sigue alto, la inflación superará el salario mínimo y las condiciones de vida están empeorando. ¿Qué propone el gobierno? Las propuestas del gobierno son la reforma laboral que busca que quitar derecho, que se trabaje más y se cobre menos que un salario mínimo. Esto viene generando contradicciones y una caída en la imagen de Bolsonaro. Este cuadro tiene que permitirnos movilizarnos en defensa de la democracia, la libertad de Lula y organizar al pueblo para retomar la ofensiva.

 

-¿Cuántos ciudades se movilizaron el domingo para pedir la liberación de Lula?

 

Nosotros llevamos a cabo la jornada mundial por la liberación de Lula para realizar acciones en la mayor cantidad de lugares posibles de Brasil y el mundo. Ayer tuvimos presencia en todas las capitales y en muchas ciudades medias que realizaron todo tipo de iniciativas. Movilizaciones callejeras, debates, seminarios, juegos de futbol por Lula libre. Fue una jornada muy exitosa que tuvo presencia en México, EEUU, Alemania, Inglaterra, Italia, Australia, Pakistán, Rusia y diversos lugares que se solidarizaron.

 

Esto sirve para avanzar en el proceso de organización de Comités “Lula Libre” en todo el mundo y creemos que es un buen momento para ganar musculatura y hacer más actividades.

 

-¿Qué estrategias tienen para instalar el debate en el escenario internacional?

 

Hoy tenemos dos líneas de actuación internacional. Una de ellas es buscar que Lula sea ganador del premio nobel de la paz. Él fue nominado y apoyado por Adolfo Pérez Esquivel y tenemos un manifiesto con más de 600 mil firmas. Creemos que una victoria de Lula para el premio Noble creará un gran impacto que puede viabilizar su libertad.

 

La segunda línea es en el Consejo de la ONU cuyo debate está programado para este mes pero ha sufrido todo tipo de maniobras por parte del gobierno brasilero. Esto demuestra que es posible avanzar para que el Estado brasilero sea condenado por quitar derechos políticos a un ciudadano brasilero.

 

8 de abril de 2019

 https://www.0223.com.ar/nota/2019-4-8-16-39-0--lula-es-un-preso-politico-si-no-estuviera-detenido-seria-presidente

 

 

https://www.alainet.org/es/articulo/199212
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