Troya sitiada

01/02/2019
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En la antigüedad cuando no se conocían los grandes estados nación como los concebimos hoy en día, las rivalidades entre los poderes reinantes se dirimían alrededor de las ciudades emblemáticas de un foco civilizatorio.

 

Hago la salvedad de los grandes imperios como el persa y el romano que a partir de una ciudad expandían a vastos territorios los usos de esas ciudades primadas, eran ciudades que a partir de su soledad se habían construido un entorno imperial.

 

Los grandes conflictos se resolvían mediante el sitio de una ciudad por los soldados de otra ciudad competidora.

 

Hoy en día cuando el protagonismo de una ciudad se funde con un territorio vasto y plural por la coexistencia de ciudades bajo una ley estatal común, son unos países los que bloquean o sitian a otros países.

 

El asedio o sitio buscaba agotar la paciencia de los sitiados mediante penurias y obligarles a presentar batalla frontal.

 

Si el sitiado no caía en la tentación de presentar combate, entonces el sitiador se obligaba al riesgo de un asalto a las murallas

 

Aquel asalto no era recomendable cuando recién se iniciaba el sitio porque las fuerzas del sitiado aún estaban intactas, pero cuando el hambre y las enfermedades, o el decaimiento de la lealtad, hacían su trabajo entonces el asalto estaba indicado.

 

Así Troya la ciudad que elegimos como ejemplo para estas disquisiciones resistió por diez años hasta que desde adentro la traición abrió las puertas al invasor: con Caballo o sin Caballo de Troya la añagaza, la mala fe y la felonía hicieron lo suyo.

 

Otra celebres ciudades y fortaleza de entre las muchas que fueron asediadas  acuden ante mi mano para que la mencione en este escrito, muchos han sido los memorables asedios y resistencias: Tiro la inexpugnable situada en una isleta separada de la costa obligó a Alejandro a construir un terraplén desde la costa hasta la isla para poder asediarla y lo logró; Cartago en 146 AC resistió no solo en las murallas sino que una vez vencidas estas sus habitantes resistieron casa por casa; Después se dio la gesta de Numancia en el 133 AC; la ciudad no tenía murallas pero los romanos le erigieron un doble cerco para doblegarla por hambre, sus habitantes prefirieron echarse a las llamas antes que rendirse; Alesia fue rendida por la genialidad de Cesar que se encerró en un doble cerco, el primero contra los galos sitiados en el poblado  y el segundo en el exterior para protegerse de los refuerzos que llagaban a socorrer a los sitiados; Constantinopla en 1453 sucumbía ante la novedad de la artillería de pesados obuses ideada y entregada a los sitiadores por un armero cristiano disidente; Barcelona en 1714 sucumbe en la Guerra de Sucesión poniendo fin a la utilidad de las murallas frente a los métodos de asedio modernos ideados por el arquitecto Vauban.

 

Pero no siempre las murallas caían ante el asedio enemigo, prueba de ello es la resistencia heroica y victoriosa de Cartagena de Indias frente al asedio del almirante Vernon. En la contemporaneidad es memorable la resistencia de Leningrado durante los tres años del asedio nazi

 

Y ahora aterricemos en la vecindad y su actualidad: ¿Que le espera a Venezuela? Somos testigos de la coordinación de un asedio diplomático y económico para aislarla, luego ha de venir el erosionador asedio paramilitar desde las fronteras. Los Estados Unidos han girado hacia una política de agresión mediante mercenarios sin vinculaciones ostensibles. Tampoco iniciarían un ataque directo que les pudiera acarrear mala prensa en el interior de su país. La política de cooptar oficiales del ejército enemigo para que minen la resistencia fue ostensible en Panamá y en Irak, pero eso se les ha transformado en una labor casi sin frutos en Venezuela.

 

Un sitio largo le espera a Venezuela, pero ya no es previsible el derrumbe de las murallas políticas de las cuales se ha rodeado el régimen chavista. El hambre y la desesperación pueden hacer su trabajo de minado, pero es muy difícil asustar con el hambre a un pueblo que siempre fue hambreado por los oligarcas. Es fácil anticipar un desenlace sostenido ya que la posibilidad del recurso a la traición por quinta columnas es cada día más lejano. Guaidó no sospecha aun cuan descartable es para el imperio y corre peligro de ser eliminado por los mismos que buscan un “casus belli”. Sería una víctima en el altar de los pretextos. Más que Caballo de Troya parece no darse cuenta de que es un jumento descartable.

 

https://www.alainet.org/es/articulo/197923
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